Finalmente la primera visita a la Argentina de Jorge Bergoglio como el papa Francisco se concretará entre noviembre y diciembre de este año y no en junio –cuando tiene previsto viajar a Brasil para la Jornada Mundial de la Juventud- como se especulaba. Según trascendió, su regreso a nuestro país se demoró para no interferir en los procesos electorales que se llevarán a cabo este año en el territorio nacional.
De esta manera tampoco estará para la beatificación del cura José Gabriel del Rosario Brochero que tendrá lugar el próximo 14 de septiembre en Alto Grande, Córdoba.
La noticia se conoció luego del encuentro que el papa tuvo con los obispos y sacerdotes de la Argentina, entre los que se encontraban el presidente del Episcopado, monseñor José María Arancedo, y los cardenales Estanislao Karlic, arzobispo emérito de Paraná, y Leonardo Sandri, prefecto de la Congregación para las Iglesias Orientales.
Según informa el diario La Nación, el pontífice ya le habría comunicado a Cristina Kirchner la decisión de postergar su retorno al país para no verse inmiscuido en el proceso electoral antes que concluya su viaje a Roma.
La mandataria, en el almuerzo que mantuvieron el pasado martes en la residencia Santa Marta del Vaticano, le propuso organizar la visita papal para el próximo diciembre. En ese mismo momento, la presidenta la habría pedido que se acerque a la Basílica de Luján.
La llegada del papa Francisco a Argentina, sin embargo, dependerán de la aún incierta agenda.
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